“Para Semana Santa recibimos un promedio de 12,000 visitantes, sin embargo, ahora la expectativa es mayor, debido a que hay más difusión de los atractivos turísticos peruanos", señaló.
Indicó que los visitantes llegarán principalmente de Tarapoto, en San Martín; y de los departamentos de Lambayeque, Cajamarca y Piura. “La mayoría aprovecha el feriado largo para visitar a sus parientes y participar en las actividades religiosas”, comentó.
Este año, a diferencia de los anteriores, la tradicional escenificación de la pasión y muerte de Cristo será en el barrio Wayku y estará a cargo de 120 jóvenes.
“Se decidió cambiar el lugar debido a que el centro poblado, ubicado a unos tres minutos de la ciudad, cuenta con un mayor espacio para albergar a los artistas y los miles de asistentes que llegan a apreciar el tradicional vía crucis que se realiza desde 1982”, explicó.
Del Castillo Tang refirió que debido a la gran afluencia de turistas que recibirá la provincia de Lamas, unos 200 policías la resguardarán durante los días feriados.
Asimismo, se ha tenido que acondicionar habitaciones para recibir a los visitantes, ya que los hoteles y centros de hospedaje de la ciudad están copados. Los operadores turísticos de la ciudad fueron capacitados para que brinden una mejor atención a los visitantes.
El burgomaestre agregó que los visitantes que lleguen a Lamas durante el feriado largo también podrán participar en la Décima Feria Artesanal Regional. “Habrá platos típicos como el tacacho con cecina y el chontajuane, y bebidas como el masato”, finalizó.
La provincia de Lamas, fundada en 1656, se ubica a 22 kilómetros al noroeste de la ciudad de Tarapoto. Algunos de sus atractivos son el museo étnico, la cascada de Chapawanki y las cataratas Ahuarpía, que tiene una caída de diez metros.
Ubicada en la cima de un cerro de unos 1,000 metros de altura, tiene calles empinadas y su principal característica es su disposición en terrazas. Se dice que el primer piso correspondía a los chancas venidos del sur, el segundo a los mestizos y el tercero era utilizado como mirador.
Hoy se conserva la división entre indios, lamistas y mestizos, quienes celebran sus fiestas patronales por separado. Pese a ubicarse en la selva, la localidad posee la estructura de los caseríos serranos, probablemente por el origen de sus habitantes.
El barrio Wayku está habitado por indios descendientes de los aguerridos chancas, quienes conservan sus tradicionales costumbres ancestrales.
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